LIBRO II
CAPITULO II
LA MANERA EN QUE EL MAESTRO DEL ARTE DEBECONDUCIRSE, REGIRSE Y GOBERNARSE A ST MISMO
AQUEL que desee dedicarse a tan grande y difícil ciencia, debe tener su mente libre de todo problema, y de ideas extrañas de cualquier naturaleza que puedan ser.
Luego debe examinar totalmente el arte o la operación que debe tomar, y escribirla regularmente en papel, especialmente escogido para este propósito, con los conjuros y exorcismos apropiados. Si hay algo que marcar o escribir, debe hacerse a la manera especificada concerniente al papel, a la pluma y a la tinta. También debe observarse en qué día y a qué hora debe realizarse el experimento, y qué cosas son necesarias para prepararse, qué se debe añadir y qué puede ser dispensado.
Una vez preparado dicho material, es necesario buscar un lugar y arreglarlo y adaptarlo para llevar a cabo el Arte Mágico y sus experimentos puedan ponerse en práctica. Habiendo dispuesto y arreglado todas estas cosas, que el Maestro del Arte vaya a un lugar apropiado o a su gabinete o cámara secreta si es conveniente para sus propósitos, y ahí puede disponer y ordenar toda la operación; puede también usar cualquier otro lugar conveniente para el propósito, a condición de que nadie sepa dónde está, y que nadie pueda verlo cuando se encuentra ahí.
Después de esto, debes desnudarte completamente y tomar un baño ya preparado con agua exorcizada, en la forma que describiremos, para que puedas bañarte y purificarte desde la corona de la cabeza hasta las plantas de los pies, diciendo:
Oh Señor Adonai, que me has formado tu indigno siervo a tu imagen y semejanza, de abyecta y vil tierra; dígnate bendecir y santificar esta agua, para que pueda ser para la salud y purificación de mi alma y de mi cuerpo, para que ninguna equivocación o engaño puedan tener lugar.
Oh poderoso e inefable Dios, que hiciste pasar a tu pueblo por el Mar Rojo, cuando salió de la tierra de Egipto, concédeme la gracia para que pueda ser purificado y regenerado de todos mis pecados pasados, por medio de esta agua, para que ninguna impureza pueda aparecer sobre mí en tu presencia.
Después de esto debes meterte completamente en el agua, y debes secarte con una toalla de lino blanco limpio, luego podrás poner sobre tu carne las vestiduras de lino blanco puro, de las que hablaremos en seguida.
Después de esto, por lo menos durante tres días, debes abstenerte de razonamientos ociosos, vanos e impuros; y de toda clase de impurezas y pecados, como se mostrará en el capítulo sobre el ayuno y la vigilia. Cada día debes recitar la siguiente oraci6n, y por lo menos una vez en la mañana, dos veces al mediodía y cinco veces antes de acostarte a dormir; esto debes hacerlo en los tres días precedentes.
LA ORACIÓN
Herachio, Asac, Asacro, Bedrimulael, Tilath, Arabonas, Terahlem, Ideodoc, Archarzel, Zophiel, Blautel, Baracata, Edoniel, Elohim, Emagro, Abragateh, Samoel, Geburahel, Cadato, Era, Elohi, Achsah, Ebmisha, Imachedel, Daniel, Dama, Elamos, Izachel, Bael, Segón, Gemón, Demas.
Oh Señor que estás sentado en los cielos y que observas los abismos abajo, concédeme tu gracia, te suplico, para que lo que conciba en mi mente pueda lograrlo en mi obra, por ti, oh Dios, el soberano regente de todo, que vives y reinas de edad en edad. Amén.